¿Qué es la nomofobia?
La nomofobia o como se conoce en inglés “no-mobile-phone-phobia” es un miedo irracional causado por no tener el celular cerca y a diferencia de la dependencia, esta adicción puede llegar a afectar la personalidad y autoestima del individuo, incluso a generar problemas de ansiedad, depresión, estrés y fobia a la sociedad.
Esta adicción al celular es considerada como la enfermedad del siglo XXI, que ha ido aumentado debido a la pandemia. El permanecer activos en las redes sociales está causando que las personas duren más horas de las necesarias en el celular y no hay un control en el manejo de estos dispositivos, explica Marcela Espinosa psicóloga experta en temas de adicción y virtualidad de Medinet.
Es importante resaltar que cualquier persona puede presentar nomofobia; sin embargo, lo padres son los que deben estar más atentos a este problema, pues los niños y adolescentes son altamente susceptibles a desarrollar una adicción al celular ya que se encuentran pasando por un momento de maduración y estímulos como videojuegos y redes sociales pueden generar una grave dependencia a los móviles.
Edgar León Lozano, psicólogo experto en problemas asociados a conducta adictiva director del bufete de psicólogos Medinet nos cuenta de las siguientes señales de alarma:
1. Sentir inseguridad cuando no se tiene el celular
cerca.
2. Priorizar el uso del celular, sin darle importancia
al estudio, trabajo, amigos o tiempo en familia.
3. Aislarse de las personas que lo rodean por estar en
el celular.
4. Mirar la pantalla del celular constantemente cuando
no se está esperando un mensaje o una llamada.
5. Sentir ansiedad cuando se encuentra en un lugar que
no puede utilizar el celular.
6. Llevar el celular a lugares como el baño o reuniones donde no se puede utilizar.
El uso de celular no solo causa problemas de conducta, sino que también trastoca el aspecto físico con consecuencias como dolores de cabeza, estómago y problemas de visión causados por estar hasta altas horas de la noche expuestos a la pantalla del celular, además de malos hábitos alimenticios y de sueño.
Para evitar que esta adicción afecte la cotidianidad, es importante que se realice una autoanálisis para identificar cuánto tiempo se permanece en el celular y a partir de esto realizar ajustes de tiempo que se le dedica al móvil y empezar a convivir con familia y amigos.
Por otra parte, los padres de niños y adolescentes pueden actuar a tiempo desarrollando actividades educativas con respecto al uso del celular, para que ellos empiecen a crear su propio criterio con el manejo de este dispositivo, además, compartir tiempo en familia con diferentes juegos didácticos u otras actividades.
Si esta adicción es mayor, busque ayuda de un profesional, ya que se pueden presentar graves cuadros de depresión y ansiedad, lo cual sería necesario actuar de forma rápida para que psicólogos expertos puedan brindar todo el apoyo.
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